No, sobre las superficies se pulveriza la cantidad ideal de líquido limpiador para que el fluido reaccione de inmediato.
La suciedad se elimina gracias a la acción química del detergente y a la acción mecánica de los cepillos, y los residuos sólidos o líquidos se aspiran al instante.
De esta manera, después del lavado, las escaleras mecánicas y los pasillos móviles quedan secos y transitables enseguida.