Imagínate que acabas de terminar tu jornada laboral y has llegado a la pista de tenis para jugar un partido.
O bien, es domingo y decides salir a practicar jogging por el parque de tu ciudad que cuenta con un circuito de fitness.
O has quedado con tu grupo de amigos para ir a jugar un partido de fútbol sala.
Ahora, imagínate que llegas a estos oasis de paz, dispuesto a pasar momentos despreocupados de deporte y diversión.
¿Qué pasaría si te encontraras los caminos de acceso sucios, las instalaciones cubiertas de hojas y arena, basura en las gradas y a los lados de la pista?
Tu motivación disminuiría rápidamente y el centro deportivo (o el carril bici o el sendero del parque...) empezaría pronto a perder visitantes. El boca a boca haría el resto.
Por desgracia ocurre con frecuencia que muy pronto las instalaciones y estructuras casi nuevas dejan de frecuentarse por falta de mantenimiento ordinario, lo cual es una verdadera pena, porque la inversión inicial en una instalación deportiva suele ser importante.
En comparación, los costes de mantenimiento ordinario son mínimos.
Con una buena planificación y el equipo adecuado, la limpieza se convierte en una operación rápida y económica, eficaz para mantener estos espacios limpios, utilizables y acogedores.
Una barredora profesional es la máquina que puede ayudar mucho en esto, gracias a su alta productividad y eficacia.
- En función de las dimensiones de las áreas a limpiar, lo más adecuado son los modelos de barredoras con conductor acompañante o con conductor sentado, que se pueden personalizar gracias a una multitud de configuraciones posibles que permiten gestionar las distintas necesidades de las zonas al aire libre y de las áreas cubiertas.
- Las barredoras motorizadas con anchura de limpieza más o menos amplia (según las dimensiones y el grado de congestión de la zona a barrer) pueden resolver rápidamente la limpieza de explanadas y vías de tránsito.
- Barren el follaje, los residuos abandonados por los espectadores y la suciedad en general.
- Cuando se utilizan para la limpieza de centros polideportivos, estadios, campos de fútbol, pabellones deportivos y otros centros dedicados a la práctica de actividades deportivas, las barredoras ayudan a reducir drásticamente los tiempos de limpieza, garantizando un resultado de calidad superior y ahorrando muchas horas de trabajo.