El chasis de acero de 340 kg de peso proporciona una increíble resistencia estructural. Además, el recubrimiento con pintura en polvo epoxi proporciona una protección adicional contra arañazos y óxido.
Un mecanismo retráctil antichoque, en el cual están montados los cepillos laterales, evita que estos se dañen.
El contenedor recolector de residuos fabricado en metal y no en plástico también es muy robusto.
Además, para las aplicaciones más exigentes, hay disponible una versión con carrocería reforzada, Total Steel, en la que el carenado está revestido con láminas de metal.
Para proteger el motor de tracción, también hay disponible una barra a prueba de golpes especial.